La entrevista de trabajo es una de las instancias más importantes dentro del proceso de búsqueda de trabajo y por ello, es importante estar preparado/a.
No existen dos entrevistas de trabajo que sean iguales. Cada reclutador o entrevistador tiene su propia manera de formular las preguntas para conocer a sus aspirantes, al igual que métodos y estrategias para conocer la idoneidad de los candidatos para el puesto de trabajo.
Sin embargo, existen algunas preguntas que pueden servirte como guía para prepararte, y poder así enfrentar la entrevista con mayor seguridad.
Te invitamos a conocer 30 preguntas que te pueden hacer en tu entrevista de trabajo, y algunas ideas para que puedas pensar cómo responderlas. ¡Toma nota!
Preguntas sobre tu personalidad en el ámbito laboral
- ¿Te gusta trabajar con gente o prefieres hacerlo solo/a?
En este punto es importante saber, que una de las cuestiones más valoradas por los reclutadores es el trabajo equipo, es decir, la habilidad que tienen las personas de trabaja codo a codo, escuchando las opiniones de los demás.
Es recomendable hacer hincapié en el trabajo en equipo, pero igual remarcar, que tiene la habilidad de organizarte y rendir por tu cuenta, de manera individual.
Idea de respuesta:
“Me adapto de manera adecuada a toda situación. A lo largo de mi carrera profesional he tenido la oportunidad de trabajar codo a codo con grandes equipos de trabajo, pero también liderar un departamento en el que me encontraba solo/a. Estoy capacitado/a para trabajar en cualquier circunstancia, respondiendo a las necesidades de la empresa.”
- ¿Te consideras un/a líder o un/a seguidor/a?
Esta es otra de las preguntas que pueden resultar medio tramposas en la entrevista de trabajo. Frente a esta cuestión, no debes avanzar de manera tajante por ninguna de las dos opciones.
Si contestas que te consideras un líder, puede parecer que no sabes recibir órdenes de un superior; y si respondes que te identificas con un subordinado, denota quizás, poca ambición de tu parte. ¿Cuál es la solución? Habla de las virtudes de uno y de otro.
Idea de respuesta:
“En los últimos años me he desempeñado como jefe de departamento, por lo que podría decir que me identifico como líder. Sin embargo, cuando empecé mi carrera lo hice como subordinado, y no puedo ignorarlo. Me adapto bien a las peticiones que vienen desde arriba. Soy abierto/a y me adaptaré a un perfil u otro según las necesidades de la empresa.”
- ¿Terminas lo que empiezas?
Es evidente que el reclutador o entrevistador no quiere escuchar que dejas tus tareas a medias, y sin terminar; pero tampoco puedes contestar las preguntas con un sencillo “Sí, siempre termino lo que empiezo”. Deberás elaborar una respuesta un poco más completa. A modo de ejemplo, mira la siguiente:
“Claro que sí. Antes de comenzar algún proyecto, siempre valoro la viabilidad del mismo, sus pros y sus contras. Si observo que es un plan factible, con posibilidades reales de éxito, pongo todo mi esfuerzo para conseguirlo. Por el contrario, si siento que faltan medios, y no es realista apostar por ese proyecto, prefiero no comenzarlo e inclinarme en algo más real.”
- Si todos los trabajos te ofrecieran la misma remuneración y consideración social, ¿qué es lo que realmente te gustaría hacer?
Presta atención a esta pregunta. Aunque parezca un tanto idealista, y creas que debas explayarte hablando sobre los sueños y metas profesionales, la realidad es que deberías reflexionar a conciencia para que respuesta luzca bien. Podrías contestar algo parecido a lo siguiente:
“Probablemente haría los mismo que estoy haciendo ahora. Me siento afortunado/a porque desde el primer momento en el que puse el pie en la universidad para estudiar mi carrera, entendí que estaba en el camino correcto y que era ello a lo que me quería dedicar.”
- ¿Cuáles son las expectativas que tienes sobre este trabajo?
Esta pregunta encierra otro significado, que podría representarse con estas dos preguntas: ¿te gusta este puesto de trabajo? ¿crees que vas a poder crecer profesionalmente aquí?
Para responder bien a esta pregunta tendrás que tener en mente estas dos opciones; y además, deberás hacer un estudio previo de la compañía para conocer más en detalle la situación actual y su forma de trabajar. Una buena respuesta sería:
“Estoy muy contento/a con las funciones que tengo que llevar adelante. Estoy convencido/a que este puesto me permitirá crecer tanto a nivel profesional como personal. Además, tengo la impresión de que es una empresa que cuida e impulsa un buen ambiente entre los empleados, lo que, sin dudas, es un punto a favor.”
Preguntas sobre tu formación académica
- Si hubieras podido, ¿qué cambios habrías introducido en el plan de estudios de tu carrera?
Siempre que hables de posibles cambios, enfócalos a aquellos que se relacionen con la mejora de tu formación, quizás el aumento de asignaturas prácticas, o la posibilidad de hacer prácticas formativas. Todo, dependiendo el sector en el que te desempeñes.
Idea de respuesta:
“Me hubiera gustado tener la posibilidad de hacer prácticas profesionales, desde el primer año de la carrera. Generalmente, estas se dan en el último curso. Y claro, si hubiera querido hacerlas en los primeros años, apenas hubieras encontrado opciones.”
- ¿Cuál fue tu experiencia más gratificante durante tu tiempo como estudiante?
Si te hacen esta pregunta o algo similar, procura mencionar aquellas experiencias gratificantes que estén directamente relacionadas con tus estudios y el crecimiento profesional.
Idea de respuesta:
“Disfrute de una Beca de estudio en el exterior. Durante un año en una Universidad fuera de mi país, no sólo pude desarrollar mis competencias profesionales, sino también que aprendí un nuevo idioma, crecí como persona, y sin dudas, no lo cambio por nada.”
- ¿En qué medida crees que tus calificaciones se deben a tu esfuerzo personal y en qué medida a tu inteligencia?
Esta es una pregunta bastante habitual, y que puede resultarte algo difícil de contestar. La clave está en ser honestos. Te damos un ejemplo de respuesta:
“Es una mezcla de las dos; creo que no puedo entender el esfuerzo personal sin la inteligencia o viceversa. Por muy inteligente que seas, si no te esfuerzas, será difícil superarte a ti mismo y ser mejor.”
- ¿Piensas en seguir ampliando tus estudios de alguna manera?
La formación constante del trabajador, es una de las cuestiones más valoradas por los reclutadores de talento. Los profesionales apuestan por el reciclaje profesional y siempre están dispuestos a seguir aprendiendo, creciendo.
Idea de respuesta:
“Claro. Creo que todos, en la medida de sus posibilidades, deberían continuar formándose a lo largo de la vida. El reciclaje profesional es fundamental para crecer, y yo mismo, en este momento me encuentro realizando algunos cursos de especialización.”
Preguntas sobre trabajos anteriores
- ¿Realizaste algún trabajo cuando te encontrabas estudiando?
Aunque esta pregunta no es la más relevante, si eres capaz de demostrar que has podido avanzar al tiempo de estudio junto con el trabajo, mostrarás una imagen de gran capacidad de trabajo, organizado y que, además, cuenta con experiencia en el ámbito laboral.
Si por alguna razón no lograste combinar estudios con trabajo, responde con sinceridad explicando los motivos que tenías para centrarte solo en tus estudios. Y puedes pensar en las siguientes preguntas para agregar a tu respuesta: ¿realizabas otro tipo de actividades extracurriculares que te permitieron completar tu formación? ¿quizás alguna actividad deportiva?
- ¿Cómo conseguiste ese trabajo por medio de las prácticas?
Esta es la oportunidad perfecta para que demuestres tus habilidades blandas, es decir, tus habilidades sociales, tu motivación y la iniciativa. Nuestra recomendación es que contestes destacando tu interés por mejorar profesionalmente, remarcando qué fue lo que la empresa donde trabajaste más destacó de tu currículum.
Idea de respuesta:
“Siempre he creído que la mejor manera de crecer en lo profesional es haciendo prácticas profesionales. Por eso, antes de terminar mis estudios, me concentré en buscar prácticas extracurriculares. Fue así, a través de LinkedIn que pude contactar con el departamento de Recursos Humanos, a quién les envié mi currículum.”
- ¿Qué aprendiste en tus trabajos anteriores? ¿Cuáles eran las funciones que desempeñabas?
Esta pregunta tiene el objetivo de analizar cómo tu experiencia de trabajo previa puede ser útil para el nuevo puesto al que aspiras. Céntrate en contar lo que te ha permitido crecer profesionalmente y que se relaciona de manera directa con el trabajo que quieres cubrir. Una opción de respuesta sería:
“Por el momento, he realizado trabajos como becario/a en departamentos de marketing. Allí, he tenido la posibilidad de aprender cómo es el día a día y, además, me ha permitido perfeccionar el manejo de programas de diseño, ya que una de mis tareas era editar las imágenes.”
- ¿Tenías a tu cargo supervisar el trabajo de alguien más?
El entrevistador querrá saber cómo te relacionas con las personas que tienes que supervisar, además de conocer qué tipo de responsabilidades te asignaban. Si cumplías el rol de supervisor/a, es esencial que cuentes qué tipo de supervisión era y cómo actuabas cuando había que corregir el trabajo de alguien más.
Ahora bien, si nunca has tenido que supervisar el trabajo de otra persona, sé sincero y explica que esta tarea no la has desarrollado hasta el momento. Podría ser de la siguiente manera:
“La verdad es que nunca he tenido que supervisar el trabajo de otra persona. Pero estoy acostumbrado/a a trabajar en equipo, dar y recibir constantemente el feedback del resultado y de los procesos. Creo que es vital para poder mejorar y crecer como profesional.”
- ¿Cuál era tu sueldo en tu último trabajo?
Con este interrogante, el reclutador quiere tantear tus expectativas salariales, y el nivel de responsabilidad que asumías en relación a él. La clave siempre es ser sincero/a y ser capaz de diferenciar entre el sueldo bruto y neto.
Nuestro consejo es que digas cuál ha sido tu sueldo bruto, ya que esto varían en función de muchas otras variables. Recuerda que, probablemente este no sea el momento para negociar un mejor salario para tu siguiente puesto de trabajo.
- ¿Cuáles son tus expectativas en relación al salario?
Antes de contestar esta pregunta, asegúrate de conocer el convenio colectivo que regula el sector y, por ende, cuáles son los salarios medios en función de la formación y la experiencia laboral. Siempre es mejor que tengas claro cuál es el mínimo, y de allí ver que tan negociable es.
Idea de respuesta:
“Estoy dispuesto/a a hablar y negociar las condiciones de trabajo y el salario que puedan ofrecerme. Pensando en la situación del sector, esperaría que el sueldo bruto se encuentre entre los X y Z dólares.”
- De tus trabajos previos, ¿cuál te ha gustado más y cuál menos?
Cuando respondas a esta pregunta, justifica bien tu respuesta. Piensa en destacar los puestos de trabajo que te han permitido crecer en tu vida profesional. Nunca hables mal de los anteriores jefes o empresas, por muy mal que la hayas pasado.
Idea de respuesta:
He disfrutado mucho de mi anterior empleo, ya que me ha permitido enfrentar nuevos retos, tales como la coordinación del departamento de atención al cliente. Y el puesto que menos he disfrutado, quizás ha sido en la primera empresa donde trabajé, donde mis tareas eran algo rutinarias. Sin embargo, también me ayudaron a crecer y ser un poco más metódico/a.
- ¿Cuál es la solución más creativa que tienes?
Aquí debes contar cómo es que te enfrentas a imprevistos o problemas de trabajo, y cómo resuelves situaciones más complicadas. En muchas ocasiones, las mejores ideas, son las que resultan más sencilla. Piensa y elabora la historia explicando bien el problema o la situación y cuenta en detalle cómo implementaste tu solución o propuesta para solucionarlo.
- ¿Cómo era tu relación con tus compañeros, con tus jefes y subordinados?
Más allá de que hayas tenido una no muy buena relación con tu antiguo jefe, compañeros o subordinados, nunca debes hablar mal de ellos. Si tenías una relación complicada con algún participante, responde contando cómo, a pesar de las diferencias, fuiste capaz de coordinarte y trabajar en equipo reconociendo la capacidad profesional de tus compañeros.
Si tuviste algún problema importante y pudiste solucionarlo, está bueno que muestres a tu reclutador que tienes los recursos para solucionar las diferencias.
Idea de respuesta:
“Soy una persona social y suelo tener una relación de cordialidad con mis compañeros y jefes de trabajo. Creo que la clave es saber escuchar y reconocer la valía profesional de cada compañero, más allá de las diferencias.”
- ¿Cuál ha sido tu logro profesional del que estás más orgulloso?
Si se trata de un logro profesional que lograste superar, así como si es una solución creativa, esta pregunta es la oportunidad para hablar de ti mismo con entusiasmo y de lo que tienes para ofrecer.
Piensa en construir un relato a modo de descripción del problema – solución para poner en contexto la relevancia de tu aporte. En muchas ocasiones, tu mayor logro profesional tiene un importante factor humano que sin dudas, puede sumar puntos a tu candidatura.
- ¿Cuál crees que fue tu peor error en el ámbito laboral?
Somos humanos y todos cometemos errores. Por eso, en este punto, lo que diferencia a un trabajador de otro, es la capacidad de reconocer esos errores y conseguirlos.
El entrevistador quiere determinar hasta qué punto eres capaz de reconocer un error, y cuál es tu capacidad de reacción frente a ellos. Cuenta un relato donde no culpes a los demás, si no, donde seas capaz de reconocer el fallo, y la manera en la que lo solucionaste. Por ejemplo:
“En una ocasión envié un email a una persona por error. Y aunque no tenía información importante, el destinatario se molestó. Y cuando me di cuenta del error, inmediatamente hablé con mi superior, proponiéndole una disculpa personal. Finalmente, el cliente comprendió que había sido un simple error humano.”
- ¿Qué es lo que menos te gustaba de tu trabajo previo?
Esta es tu oportunidad para mostrar una visión optimista del entorno de trabajo. Recuerda que no debes caer en la crítica destructiva, y no debes hablar mal de las empresas anteriores, empleadores y/o compañeros. Concéntrate en mencionar los aspectos de tu trabajo que eran más estimulantes.
Por ejemplo, si tenías asignada alguna tarea de rutina, puede hacer hincapié en que prefieres tareas que supongan un mayor reto, pero que, de igual manera, esas te han servido para organizarte y ser más meticuloso.
- Describe un día típico de tu trabajo anterior
Aquí puedes mencionar tus capacidades como trabajador organizado, y capaz de priorizar las tareas que se requieran. Si el puesto que tenías es similar al que aspiras ahora, puedes demostrar que ya conoces las tareas que tienes que desarrollar.
Si tu trabajo anterior no se relaciona con el que buscas actualmente, demuestra que eres una persona organizada, capaz de establecer prioridades y con iniciativa para afrontar los nuevos desafíos.
- ¿Por qué has estado tanto tiempo en inactividad?
Los períodos largos sin trabajo, suelen llamar la atención de los reclutadores. Cuando te hagan esta pregunta, da una respuesta que justifiques si ha sido por cuestiones ajenas a ti o bien, si ha sido una decisión personal.
Para explicar los vacíos laborales en tu currículum, debes poder explicar que has hecho mientras tanto, si te has formado, que otras actividades llevaste a cabo. Si eres un autodidacta, aprovecha para resaltarlo.
Ejemplo de respuesta:
“He estado durante un tiempo sin la oportunidad de trabajar en mi sector. Sin embargo, he aprovechado la ocasión para formarme de manera autodidacta aprendiendo a manejar programas informáticos y mejorando mi nivel de inglés. Y siempre estoy al día con las noticias y novedades que van surgiendo en mi sector.”
- ¿Por qué quieres cambiar de trabajo?
Si aún te encuentras activo en otro trabajo, es probable que el entrevistador quiera saber tu motivación para cambiar de lugar de trabajo. Habla de las posibilidades de crecimiento y mejora profesional que te ofrece el nuevo puesto. Una buena respuesta sería la siguiente:
“Después de un tiempo considerado trabajando para esta empresa, lo cierto es que quiero emprender y asumir nuevos retos y desafíos profesionales. Y estoy convencido que este lugar me lo permitirá, aportando toda mi experiencia previa.”
Preguntas sobre la vacante laboral que solicitas
- ¿Qué sabes de nuestra empresa?
Esta pregunta contempla tu interés real en la compañía y el querer trabajar allí. Entonces, se trata de una pregunta que no se debe improvisar, ya que, para poder responder adecuadamente, es necesario conocer la empresa, su actividad y filosofía de trabajo.
Para prepararte puedes leer su página web, y hacer una búsqueda en Internet sobre la empresa. Si tienen redes sociales, puedes seguirlos para estar al día con las novedades.
- ¿Me explicarías tu trayectoria profesional?
Esta es una de las clásicas preguntas de una entrevista. Aunque parezca fácil, requiere de una preparación. El que te entrevista no quiere que hagas una descripción cronológica de tu experiencia. Si no más bien, espera que pueda destacar los puestos más relevantes que hayas tenido, por qué han sido tan importante y cómo has ido cambiando de trabajo en trabajo.
Idea de respuesta:
“Cuando terminé mi carrera universitaria, tuve la oportunidad de hacer prácticas en una consultora. Creo que, gracias a esa experiencia, más tarde, pude empezar a trabajar en un despacho donde crecí profesionalmente gracias al gran aporte y profesionalidad de mis compañeros. También, decidí aprovechar para cursar un máster especializado, gracias al que me encuentro en la búsqueda de nuevos retos.”
- ¿Por qué crees que eres el candidato ideal para el puesto ofrecido?
Si conoces los detalles del puesto, debes contestar explicando qué habilidades y experiencia tienen y que van con el puesto que solicitas. Acompaña cada característica con algún ejemplo basado en tu experiencia profesional. Podrías contestar algo similar a los siguiente:
“Me considero una persona cordial y amable, características fundamentales para dedicarse al área comercial. En mi trabajo anteriores, una de mis responsabilidades era atender al público, por lo que estoy acostumbrado a trata con mucha gente, y me gusta.”
- Cuéntanos, ¿cuáles son tus puntos fuertes y tus puntos débiles?
Esta pregunta te la harán en cualquier entrevista de trabajo, por lo que debes prepararte. Con ella, quien te entrevista espera descubrir hasta qué punto conoces las actividades que te asignarán y también, tu perfil profesional.
Si quieres dar una respuesta auténtica, apóyate en tus características con ejemplos de tus experiencias laborales previas. Por ejemplo:
“Soy una persona con gran iniciativa. En la empresa anterior…”
De la misma manera, cuando hables de tus puntos débiles, no se trata de evaluar lo negativo, sino de conocer el grado de autoconocimiento que tienes, para dar un paso hacia adelante y mejorar. Un ejemplo sería:
“Lo cierto es que soy un poco caótico/a con la organización de las tareas, por eso, tengo la costumbre de hacerme listas con los más importante para cada semana”.
- ¿Qué te ves haciendo dentro de 5 o 10 años?
Esta pregunta nunca falta en una entrevista, y tiene el objetivo de poder conocer tus aspiraciones profesionales. Por supuesto, predecir a tan largo plazo no es fácil, pero con una respuesta adecuada podrá hacerse una idea acerca de lo que buscas en el ámbito laboral.
Idea de respuesta:
“Me gustaría seguir creciendo constantemente en mi vida profesional. Espero poder especializarme en comercio internacional, y tener la oportunidad de liderar proyectos en ese ámbito. En los próximos años me gustaría poder hacer algún curso de formación complementaria, mientras trabajo y sigo mejorando en esta empresa.”
- ¿Qué objetivos tienes a largo plazo y cómo crees lograrlos?
Esta última pregunta te permitirá extenderte en la respuesta, contando más sobre tus mayores objetivos, siempre explicando cómo crees que alcanzarás a cumplirlos. Es un buen momento para mostrar tu compromiso personal con la empresa, si es que cree que pueden avanzar a nivel profesional en ella.
Estas son sólo algunas de las preguntas, con las que te podrás encontrar en una entrevista de trabajo. Aunque no son determinantes, así como tampoco sus respuestas, esperamos te sirvan como guía para pensar en respuestas concretas y correctas para que tu entrevista sea un éxito.
